Kashmir en Colegiales

Si a uno lo consultan sobre nombres relacionados al rock danés, el que más fácil viene a la mente es el de Lars Ulrich (baterista de Metallica) y con mucho más esfuerzo, The Raveonettes. Pero en un mundo globalizado y conectado, donde las distancias de a poco dejan de existir, se puede agregar el de Kashmir. 

 

Su origen se remonta a 1991 como trío con Kasper Eistrup (voz y guitarra), Mads Tunebjerg (bajo) y Asger Techau (batería) y para sorpresa, se llamaban Nirvana.  Al notar que en los EE.UU., en la ciudad  de Seattle, una banda con el mismo nombre triunfaba con el disco “Nevermind”, decidieron cambiar por el tema de Led Zeppelín, Kashmir. Tiempo después se unió el cuarto integrante, Henrik Lindstrand (teclados y guitarra).

En su primer desembarco en nuestras tierras, el cuarteto desarrolló su rock preciso, de sonido limpio el pasado sábado 12 de marzo en el Teatro de Colegiales. En el ambiente fluían, pero en forma serena, las expectativas que genera todo debut tanto para los músicos como el público presente. Este último integrado además por cabelleras blondas de todas las longitudes que indicaba la presencia de extranjeros en el piso del Teatro.

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